Halloween es una fiesta de origen pagano que se celebra todos los años durante la noche del 31 de octubre, víspera del Día de Todos los Santos.

Al contrario de lo que muchos creen, no tiene su origen en Estados Unidos, sino en el antiguo festival celta llamado Samhain, que se traduce literalmente como "fin del verano". Se celebraba cuando terminaba la temporada de cosechas para dar la bienvenida al Año Nuevo celta.

La fiesta se celebraba anualmente en todo el mundo y es una de las más populares de la cultura mundial. Los celtas creían que la noche entre el 31 de octubre y el 1 de noviembre los espíritus de los muertos regresaban al mundo de los vivos.

Durante el Samhain se celebraban una serie de ritos sagrados para comunicarse con los muertos. Se colocaban velas encendidas en las ventanas de las casas para ayudarles a encontrar su camino.

Cuando los romanos ocuparon las tierras celtas, la festividad tradicional se mezcló con sus costumbres. Luego, los Papas Gregorio III y Gregorio IV hicieron lo posible por suplantar Halloween por el Día de Todos los Santos, trasladando esta festividad del 13 de mayo al 1 de noviembre.

Cómo se extendió al resto del mundo

Fueron los inmigrantes irlandeses quienes llevaron Halloween a Estados Unidos a mediados del Siglo XIX. Sin embargo, en el país norteamericano no empezó a celebrarse de forma masiva hasta el año 1921. Fue entonces cuando tuvo lugar el primer desfile de Halloween en Minnesota.

A partir de entonces fue adquiriendo cada vez mayor popularidad. Tras la década del 70, Halloween se extendió al resto del mundo gracias a la televisión y al cine. En 1978 se estrenó la película de terror Halloween, de John Carpenter.

Ahora esta festividad se disfruta en casi todo el mundo. 

Los disfraces que se repetirán en todas las fiestas de Halloween

A las puertas de la noche más terrorífica del año, los fanáticos del Día de los Muertos preparan su mejor disfraz, aquel que deje boquiabierto a todos los invitados de la fiesta. Como en todo, hay quienes les gusta tirar de tópicos, los que lo apuestan todo al maquillaje o los que se decantan por la originalidad.

Todos los años, además de los clásicos caperucita y el lobo, la bruja y Drácula, hay algunos personajes de la televisión o el cine que destacan por encima del resto y se convierten en el perfecto disfraz de Halloween.

Si lo que uno busca es sorprender, esta es la lista de los disfraces que se repetirán en todas las fiestas y que se deberían evitar:

Joker: La película más taquillera para adultos de la historia del cine, tenía que recibir una mención especial. El carismático personaje interpretado por Joaquin Phoenix, Joker, será sin lugar a dudas el villano más repetido de este Halloween.

Harley Quinn: No hay Joker sin Harley Quinn. A las puertas del estreno de la película Aves de presa, la producción de Margot Robbie, este año volverá a ser tendencia el conjunto sexy de la otra de las villanas más ‘top’ del momento. Fácil de elaborar, aunque demasiado sexualizado.

Payaso IT: El estreno de IT 2 comportará la aparición de un escuadrón de payasos con un globo rojo en la mano en casi todas las fiestas. Basta con un vestido o traje blanco, unos botones rojos y una sonrisa terrorífica pintada en la cara.

La casa de papel: Otro año más, el mono rojo y la careta daliniana de los atracadores de La casa de papel se colarán en las celebraciones. El ‘boom’ de la serie de Netflix, tanto en España como a nivel internacional, ha despertado una gran pasión por sus personajes, por lo que, si escuchas la canción de Bella Ciao, huye.

Maléfica: Es uno de los disfraces que más trabajo comportan pero, tras el estreno de la película de Disney, se convirtió en tendencia en 2014. Ahora, la segunda entrega trae de vuelta a la villana favorita de Disney. Es decir, que el nombre de Maléfica suena muy fuerte este año.