El mandatario bonaerense acusó al presidente de excluirlo por motivos políticos, cuestionó la quita de fondos coparticipables y defendió la relevancia de su distrito.
El Gobernador bonaerense Axel Kicillof cuestionó su exclusión de la cumbre con gobernadores convocada por el presidente Javier Milei en la Casa Rosada.
Lo hizo al considerar que la decisión responde a "una estrategia política y no institucional, orientada a mostrar respaldo a nivel internacional".
En diálogo con Radio 10, afirmó que el jefe de Estado busca "construir la foto que le pidieron Donald Trump, Scott Bessent y Barry Bennett" y agregó: "Yo soy número fijo para el insulto y los maltratos del presidente libertario".
También señaló que "comete un error el Gobierno porque no invita a algunos gobernadores", en referencia a la falta de convocatoria para él, Gildo Insfrán, de Formosa; Ricardo Quintela, de La Rioja, y Gustavo Melella, de Tierra del Fuego.
"Quiero discutir seriamente los problemas del país. Nunca insulté ni maltraté al Presidente, aunque él lo hace como deporte", expresó.
En ese sentido, remarcó la importancia de su distrito: "La provincia de Buenos Aires representa al 40% de la población, misma cifra porcentual que se adjudicó de la recaudación en la estructura federal".
Además, destacó que "el 50% de la industria" se concentra en territorio bonaerense, "con todas las dificultades que genera el programa económico" libertario.
Recordó que tras las elecciones locales de septiembre había manifestado su disposición al diálogo con Milei: "Esa noche dije: 'Presidente, juntémonos a trabajar'. Que no estemos de acuerdo no impide discutir. Pero si no hay espacio para modificar nada, tampoco tiene sentido ir".
A su vez, acusó al Poder Ejecutivo Nacional de haber tomado "decisiones ilegales", como la "quita de fondos" coparticipables.
"Casi todos los gobernadores fuimos a la Corte, hay mucho pendiente. Milei debería aprender a convivir con las diferencias", sostuvo.
